martes, junio 09, 2009

Falta de ignorancia.

En época de crisis uno de los primeros recortes en los gastos que hacen muchas empresas es la publicidad, error craso porque si el mercado está complicado y las ventas bajas, al no haber difusión del producto que se promociona tampoco habrá compradores. Es un círculo vicioso y nunca debe descuidarse ese renglón que se encarga de mantener vivo el nombre de su empresa o producto en la mente de los consumidores. Cuántas veces nos antojamos de chuparnos una paleta o tomarnos una gaseosa por el solo hecho de verlas en una valla o en la pantalla del televisor; y al recorrer las góndolas del supermercado nuestro inconsciente escoge este o aquel detergente, porque de tanto machacarlo en los avisos comerciales uno termina por comerse el cuento de que es el mejor.

A su vez los medios de comunicación dependen económicamente de la pauta que anuncien en sus espacios o publicaciones; claro que muchos abusan y hay que ver cómo reniega el televidente cuando la pausa comercial se prolonga en forma exagerada, o lo jarto que es mirar una revista en la que más de la mitad de su contenido son anuncios comerciales. Pocas empresas, negocios o personas tienen la capacidad de pagar publicidad diaria en la primera página de un periódico de circulación nacional, por lo que me llaman la atención dos avisitos que salen desde hace ya bastante tiempo en este matutino.

Me detuve a leer con cuidado ambos anuncios y pude deducir que el que siga pobre, no encuentre la forma de que su media naranja le pare bolas o tenga problemas con el pájaro, es por falta de ignorancia, como decía mi mamá. Conseguir plata es todos los días más complicado, porque el cuento de la crisis económica tiene más de un negocio estancado y muchos prefieren esperar a ver dónde va a caer este globo, antes de embarcarse en una compra u otro gasto considerable. La desesperación de los miles de desempleados crece a cada momento y la posibilidad de conseguir una ocupación informal está todos los días más competida.

Pues basta con darle una llamadita al personaje que ofrece sus servicios en uno de esos avisos, y el hombre, que según entiendo acumuló sus conocimientos y experiencias en algún sitio de nuestros misteriosos y extensos llanos orientales, le soluciona su problema en par patadas. En solo tres días logra, sin saberse cómo carajo lo hace, ligar a esa persona que lo castiga con el látigo del desprecio; como cuando su mujer no le dirige la palabra porque lo pilló con la moza en algún metedero de mala muerte, o ese papito que la ve como a un moco y no le para bolas por fea y arrancada. Esta práctica quiromántica no produce ningún daño a los implicados y la susodicha ni siquiera se entera de que la están rezando; el asunto es sin tocar aro.

Con este cliente usted encuentra solución a esa mala suerte que siempre lo acompaña y que así haga su chance diario, no coge ni terminal; después de la consulta se le puede medir al sorteo extraordinario y eso es como con la mano. Si no logra encontrar pareja, todo el mundo le hace el fo, lo discriminan y pordebajean, deje de sufrir y escoja la nena o el príncipe que desee, porque después de consultar con el gurú le van a llover ofertas y proposiciones. A quienes son salados en los negocios, siempre los tumban y les dan en la cabeza, los ponen a manejar una finca y la chocan, y no sirven ni para vender empanadas, tranquilos que ahí encuentran la forma de convertirse en un Roquefeler. La impotencia deja de ser un inconveniente a la hora de entrar a matar, y dizque soluciona los problemas de la infidelidad en las parejas (seguro le cauteriza los cachos al ofendido). Además, ayuda a encontrar tesoros y guacas; qué tal uno saltando matones y sentado sobre un entierro sin sospecharlo siquiera. Pero lo más increíble es que no cobra por sus trabajos y cada quién hace una donación voluntaria, y para que se vayan de espaldas, la consulta puede ser por teléfono.

Recibo un mensaje electrónico donde ofrecen diez pastillas de viagra por algo más de cien mil pesos, lo que supuestamente garantiza igual número de polvachos. Pues en el otro aviso al que me refiero, encuentro una ganga que nadie debe dejar pasar. Una sola pastilla de este producto lo convierte en un toro y puede garantizarle varios estertores en seguidilla, y después de varios puyazos le suenan los tres avisos ¡sin doblar! Quince tabletas por solo veinte mil devaluados pesitos y aseguran que las erecciones son como para partir panela, y que poniéndole fundamento, puede disfrutar de hasta tres embates con el mismo vigor y pasión que le puso al primero; ¿de eso tan bueno sí darán tanto? La panacea la venden allí no más y como gancho para atraer a la clientela ofrecen de regalo dizque un gel retardante para mujer… Los puntos suspensivos me dejan intranquilo y es mejor que aclaren de qué tipo de producto se trata. Qué tal que después de salir del motel y llevar la muchacha a la casa, le dé la amorosa y el retardo sea para bajarse del carro. ¡Qué nervios!

3 comentarios:

José María Ruiz Palacio dijo...

Si don Pablo; eso está ocurriendo con nuestros periódicos que por vender pauta, le venden el alma al diablo. Y eso que "La Patria" siempre ha sido seriecito. Imagine otros más "populares"...
Eso de brujos y pócimas para todo es como lo del helecho y los marranos...Adivine cuál se acabará primero. Y no faltan los pendejos que se le apuntan al cuento y se tragan ese "calentao"...
¡Nada que hacer!

JuanCé dijo...

Pablo:
Lo que pasa es que nosotros somos como bobitos; podríamos juntarnos y montar una verdadera academia de ese tipo de cosas; para iniciar alguien nos ayudará a convencer a la gente especialmente de Los Llanos y de la Costa, que nuestros concimientos fueron adquiridos en las misteriosas cumbres de la montañas paisas.
Eso es suficiente: al que llame, se le lee un horóscopo cualquiera, se le da algún consejo sobre la ingesta de fibras, el respeto a la naturaleza y que, porsiaca, que se rece ahí 4 o 5 oraciones a los niños Jesuses de todaa partes.
Que la tarifa es gratis, pero se reciben donaciones a partir de $Cien mil pa´rriba...
¿Si ves? Y nos vamos ampliando.

Jorge Iván dijo...

números favoritos para el chance:

todos del cero al nueve

dias de suerte:

lunes, martes, miércoles, jueves, viernes, sábado y domingo

pila´o